En la industria cinematográfica actual, existen diversas formas de distribución que determinan el recorrido de una película. Por un lado, están aquellas producciones comerciales que, con grandes presupuestos y un marketing global, se lanzan simultáneamente en cines de todo el mundo. Por otro, encontramos las películas que se estrenan primero en festivales, y, con suerte, logran abrirse paso hacia cines comerciales y plataformas de streaming, alcanzando una audiencia más amplia. Sin embargo, hay filmes que permanecen exclusivamente dentro del circuito de festivales, donde el verdadero valor radica en el reconocimiento artístico y la crítica especializada.

En este contexto, las críticas cinematográficas, a diferencia de las de arte, poseen una cualidad atemporal: se escriben con la intención de que la película encuentre su público, generando interés y motivando a los espectadores a descubrirla y disfrutarla. Así, el cine se convierte en un espacio de reflexión y difusión que va más allá de la taquilla y el consumo inmediato. Por eso a pesar de que la 31ª edición de L’Alternativa concluyó el pasado 24 de noviembre, el festival continuará teniendo presencia en Filmin del 20 de enero al 2 de febrero, y ofrece contenidos gratuitos en YouTube , ampliando su alcance.

Y para prolongar la conversación sobre las películas presentadas en esta edición, hablaré de tres filmes que, en apariencia, no tienen nada en común, pero que, para mí, se entrelazan e interseccionan, conectándose en puntos a veces profundamente personales, a veces universales. Las novias del sur, Grand Tour y Caja de resistencia reflexionan sobre las relaciones intergeneracionales; los vínculos personales en tensión con las expectativas sociales y políticas; y la resistencia cultural al tiempo que desafían los límites de la narrativa convencional. En este diálogo entre el cine de autor y la experimentación, podemos rastrear huellas de directores de culto como Chantal Akerman o Jean-Luc Godard, cuya obras también explora la compleja interacción entre el individuo y la historia, la memoria y la evasión.

Las novias del sur: memoria, feminismo y evasión

En el mediometraje documental Las novias del sur, Elena López Riera nos presenta una reflexión sobre las mujeres del sur que, al hablar de sus relaciones pasadas y su sexualidad, exploran el peso de la memoria y el legado. A través de sus relatos, estas mujeres se enfrentan a la cuestión de cómo sus historias personales se tejen con las estructuras sociales que las moldean. Si bien este enfoque remite a la obra de Chantal Akerman en films como Jeanne Dielman, donde la repetición de las acciones cotidianas se convierte en un acto de resistencia frente a la invisibilización de la mujer en la sociedad patriarcal.

Las novias del sur también muestra cómo las mujeres enfrentan una historia que es a la vez personal y colectiva, moldeada por relaciones que las definen pero también las constriñen. La narración se entreteje con la voz de la propia directora, quien reconstruye cada una de estas historias a través de su experiencia personal, trazando una genealogía femenina que a través de su no-maternidad termina en ella misma.

Como mujer nacida en Andalucía, Las novias del sur es un reflejo de mis vivencias a través de la mirada de la directora. Una memoria delicada de esas mujeres que nos preceden, cuyas historias de amor, maternidad y renuncia se convierten en un legado invisible, como un eco silencioso que no se transmite a la siguiente generación.

Grand Tour: relaciones en fuga, memoria visual y experimentación narrativa

Grand Tour, el largometraje de Miguel Gomes, lleva el concepto de la evasión a un nivel más explícito, donde las relaciones no solo se desvanecen, sino que se distorsionan en un juego entre el pasado y el presente. La historia de Edward y su prometida Molly es la historia de una fuga de un amor no consumado, casi como Pierrot le Fou de Godard, donde el deseo y la fuga se negocian constantemente.

Sin embargo, la huida en Grand Tour no solo es emocional, sino también una reflexión sobre cómo el cine puede reflejar la descomposición del tiempo y del espacio. Gomes crea una narración dual que se desplaza entre recreaciones históricas y momentos documentales, formando una especie de espejo distorsionado de la historia del cine.

Caja de resistencia: archivo, resistencia cultural y la memoria perdida

Caja de resistencia es el filme ganador al mejor largo nacional en la edición de L’Alternativa 2024. El documental de Concha Barquero Artés y Alejandro Alvarado Jódar se adentra en el terreno de la memoria y el archivo como un acto político y de resistencia. Concha y Alejandro revisitan el legado de Fernando Ruiz Vergara, cineasta andaluz que sufrió la censura en los primeros años de la democracia española, y recupera sus proyectos nunca realizados como un acto de resistencia cultural.

Como Jean-Marie Straub y Danièle Huillet en Chronicle of Anna Magdalena Bach el dúo Barquero-Alvarado juega con la distorsión temporal y la reconstrucción histórica, así Caja de resistencia establece un diálogo entre el pasado reciente y el presente político. La memoria de Ruiz Vergara, sepultada por la censura, resurge en esta película como un testimonio de la lucha contra las estructuras autoritarias que intentan borrar las voces disidentes.

El reconocimiento de esta película no solo pone en valor la labor de los cineastas andaluces, sino que también destaca la importancia del cine como un espacio de resistencia política frente a las narrativas dominantes. En un contexto de creciente crisis de representación, el archivo se convierte en un mecanismo de subversión, un acto de reapropiación de la memoria histórica que resiste a la desaparición.

Estas tres películas no solo se interconectan a través de sus exploraciones sobre las relaciones humanas, sino que también comparten un enfoque crítico hacia las memorias y las escapatorias que forman parte de nuestra historia personal y colectiva. En un momento en el que la resistencia política y cultural se vuelve cada vez más necesaria, el cine contemporáneo se presenta como un espacio donde las voces que han sido silenciadas —ya sea por el patriarcado, la censura o el olvido— pueden ser recuperadas y reimaginadas. A través de películas como Las novias del sur, Grand Tour y Caja de resistencia, el cine demuestra su poder como vehículo para desmantelar las narrativas dominantes y abrir nuevas puertas a la memoria, las relaciones y las luchas por el reconocimiento.

(Imagen de portada: Fotograma del filme Caja de resistencia de Concha Barquero Artés y Alejandro Alvarado Jódar)