Parte 3: La mirada benevolente

La mirada malévola: El capitalismo del terror

Tras más de 55 años de control militar israelí, Cisjordania y el casco antiguo de Hebrón se han transformado en la quintaesencia del militarismo en la era digital. Desde sensores de movimiento y temperatura, escáneres de matrículas y circuitos cerrados de televisión 24/7 hasta avanzadas tecnologías algorítmicas de reconocimiento facial, Hebrón se asemeja a una fantasía orwelliana, en la que la única y malévola mirada de una torre de vigilancia militar engendra un conjunto de dispositivos electrónicos de vigilancia alimentados por ordenadores y códigos.

En 2021, el Washington Post publicó la reveladora historia de la nefasta tecnología de reconocimiento facial Blue Wolf. Blue Wolf utiliza la tecnología de teléfonos inteligentes para capturar imágenes de rostros palestinos y cotejarlos con una base de datos biométricos conocida como Wolf Pack, que contiene perfiles de prácticamente todos los palestinos de Cisjordania. Esta base de datos incluye fotografías de los individuos, sus antecedentes familiares, su educación y una clasificación de seguridad para cada persona. La aplicación del teléfono parpadea en diferentes colores para alertar a los soldados si una persona debe ser detenida, arrestada o dejada en paz. Los colonos judíos de Cisjordania han desarrollado otra aplicación civil para teléfonos inteligentes, White Wolf. Aunque a los colonos no se les permite detener a personas, los voluntarios de seguridad pueden utilizar White Wolf para escanear la tarjeta de identificación de un palestino antes de que esa persona entre en un asentamiento. Además de Blue Wolf, el ejército israelí ha instalado cámaras de escaneo facial en la ciudad dividida de Hebrón, para ayudar a los soldados de los puestos de control a identificar a los palestinos antes de que presenten sus documentos de identidad. Una red más amplia de cámaras de circuito cerrado de televisión, bautizada como «Hebrón Smart City», permite vigilar en tiempo real a la población de la ciudad e incluso, supuestamente, ver el interior de los hogares de los palestinos.

Mapa, fuente: B’Tselem

«Mientras que los países desarrollados de todo el mundo imponen restricciones a fotografías, reconocimiento facial y vigilancia, la situación descrita [en Hebrón] constituye una grave violación de derechos básicos, como el derecho a la intimidad, ya que se incentiva a los soldados, en una especie de competición, para que recojan el mayor número posible de fotos de hombres, mujeres y niños palestinos», declaró Roni Pelli, abogado de la Asociación por los Derechos Civiles en Israel.

Cambios políticos y económicos globales más amplios han legitimado sistemas de vigilancia militar como Blue Wolf y tienen su origen en el advenimiento del Capitalismo de la Vigilancia. En contextos coloniales, este sistema se desplaza hacia el ámbito de lo que a menudo se denomina «capitalismo del terror», satisfaciendo las demandas capitalistas de datos y mano de obra barata para articular y actualizar los objetivos de la dominación colonial. Múltiples estudios etnográficos llegan a la conclusión de que esta metodología de colonización, entre poblaciones minoritarias (consideradas al margen de la protección de los derechos civiles), genera desposesión, explotación y tormento socio-psicológico.

«Las cámaras sólo tienen un ojo: ver a los palestinos. Te graban desde el momento en que sales de casa hasta que vuelves a casa» – Issa Amro, defensor palestino de los derechos humanos ante la ONU y cofundador de Artists + Allies x Hebron.

Artists + Allies X Hebron

Artists + Allies x Hebron (AAH) fue fundada por Issa Amro (nacido en 1980), activista palestino residente en Hebrón, Cisjordania. Además es cofundador del grupo  Juventud contra los Asentamientos. Amro defiende el uso de la resistencia no violenta y la desobediencia civil para luchar contra la ocupación israelí de los Territorios Palestinos. En 2010 fue declarado «defensor de los derechos humanos del año en Palestina» por la Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (OHCHR). Entre sus muchas otras responsabilidades como activista, dirige AAH junto a Adam Broomberg. AAH pretende llamar la atención de la comunidad internacional sobre la situación en Hebrón H2 de dos maneras: en primer lugar, difundiendo los proyectos realizados en H2 a una red internacional de espacios culturales y sus plataformas digitales. En segundo lugar, llevando a Hebrón a miembros destacados del mundo del arte para que conozcan a los artistas y activistas locales y adquieran un conocimiento creíble de la situación sobre el terreno.

La mirada benevolente

Desde las montañas de Hebrón, en el sur, hasta Galilea, en el norte, prevalecen intermitentemente dos grandes paisajes: los pinares de coníferas y los olivares caducifolios. Estos árboles son emblemáticos de la larga y desgastada lucha por la propiedad de la tierra entre las dos naciones de Israel y Palestina. Los pinares de coníferas son el símbolo totémico de la identidad israelí, inspirado en relatos históricos sobre el cultivo de una cornucopia sagrada y característico de la sociedad civilizada europea. El olivo desempeña un papel totémico similar para la identidad palestina, de cultura, resistencia, soberanía agraria y tradición intergeneracional. La recolección de la aceituna en Palestina tiene lugar cada año en otoño, por lo que esta época es crucial en la vida de muchas familias palestinas. Entre agosto de 2020 y 2021, más de 9.300 olivos fueron destruidos en Cisjordania. Desde 1967, las autoridades y los colonos israelíes han destruido un total de 800.000 olivos palestinos, algunos de los cuales tenían 4000 años.

Nuestra estrategia de contravigilancia coopta la tecnología de vigilancia pero con un propósito radicalmente distinto: esta mirada electrónica no pretende controlar, castigar o infundir miedo. Por el contrario, es un intento de construir comunidad y prestar servicios. AAH configuró cámaras de vigilancia con Raspberry pi y las instaló en olivares no disputados de propiedad palestina. Las imágenes se emiten a diversas instituciones artísticas y sitios web de todo el mundo. La imagen meditativa de varios olivos centenarios moviéndose suavemente con el viento es simbólica, pero también práctica. Las cámaras rinden respeto a las especies endémicas más antiguas de Palestina, al tiempo que fomentan un sentido de práctica transparente y de administración internacional.

Photograph of burning olive tree by Issa Amro

En vísperas de la campaña anual de recogida de aceitunas de Hebrón, que se celebrará entre el 22 de octubre y el 15 de noviembre de este año, se prendió fuego en la cavidad del tronco a cuatro olivos milenarios situados en los alrededores de la casa de Amro, en Tal Rumeidah. Los ataques a los olivos suelen ser obra de grupos de colonos de extrema derecha que cometen actos de violencia contra la naturaleza y la comunidad en Hebrón. «Ataques de precio» es un término utilizado para los ataques de venganza como una forma de castigo por las decisiones gubernamentales que parecen oponerse a las agendas de la derecha. La temporada de cosecha es un adhesivo económico e intergeneracional clave para la soberanía cultural y fiscal. Muchos palestinos se tomarán días libres del trabajo para pasar tiempo con sus familiares, vecinos y amigos y mantener así su íntima conexión con su tierra y sus tradiciones culturales. Entre 80.000 y 100.000 familias dependen de la aceituna y sus productos derivados para sus ingresos primarios o secundarios. El número y la intensidad de los ataques a los árboles aumentan exponencialmente durante la temporada de la aceituna. Paisajes aparentemente estáticos y mudos se impregnan de las narraciones de militares, arquitectos, agricultores, colonos y funcionarios del gobierno para expresar la dinámica cultural, económica y jurídica que sigue dando forma y remodelando los propios paisajes.

A partir de este momento, se ha creado una recaudación de fondos para ayudar a Amro en la protección de estos árboles milenarios y sagrados, aquí el enlace. Las cámaras de AAH se volverán a instalar para la temporada de cosecha con el fin de ofrecer opciones para el apoyo a nuestro proyecto de administración global con el fin de proteger lo que queda de esta antigua especie y participar en una iniciativa global de supervivencia cultural que está íntimamente conectada con las personas y la tierra.

AAH quiere dar las gracias a:
Issa Amro (Comisiario / Director)
Adam Broomberg (Comisario / Director)
Batuhan Keskiner (Producción creativa y técnica)
Lena Holzer (Comisaria / Art Director)
Rafael Gonzalez (Investigación y Studio Manager)
Natasha Garbawi (Asistente de Producción)
Lina Aastrup (Comisiaria)
Natalie Strecker (ex Human Rights Monitor (Hebron), Activista & Entrenadora)
Christian Nolle (Creativo y producción técnica)

AAH Poesía del árbol por Adam Broomberg & Lena Holzer

Artículo de Melanie Pyne con contribuciones de Adam Broomberg, Rebecca Routman y Mariia Vydrenko en nombre de Artists + Allies x Hebron (AAH). AAH son Issa Amro (Hebron)  & Adam Broomberg (Berlin).