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Necesitamos recordatorios, constantemente. Los primeros días de confinamiento, tras el inicio de la pandemia, todo eran buenos propósitos: «seremos mejores», «esto nos hará más conscientes», «asumiremos responsabilidades»… y recién estrenada la «nueva normalidad» (qué peligro esta nueva terminología), vemos que las cosas no han cambiado demasiado. Más o menos contenida la crisis sanitaria, hay prisa por abrir fronteras y turismo masivo e incentivar el consumo. Y los expertos nos avisan. Puede llegar una segunda ola que además nos encuentre cansados, a los profesionales sanitarios exhaustos y sin las inversiones adecuadas para recuperar el sistema sanitario público.
Necesitamos gestos, continuos y puntuales, que nos reconcilien con el mundo. Hace unos días, lo publicaba Eric Holthaus en The Correspondent, el cambio climático responde a una batalla por los derechos civiles y, al final, cualquier acción contra el cambio climático es una acción a favor de la justicia.
Blanca de la Torre hace tiempo que explora estos temas y propone sustituir la denominación Antropoceno, que reconoce al ser humano como responsable de la degradación del planeta por el de bioceno, que sitúa la vida en el centro. A esto se ha unido la iniciativa del Teatre del Liceu de Barcelona de colaborar con el artista Eugenio Ampudia en un proyecto ambicioso, pertinente y necesario, que cuente de otra manera todas las experiencias que hemos vivido estos meses, para hacer reflexionar sobre la necesidad de un cambio y la reivindicación de que quizás son artistas y profesionales de la cultura, cuyas creaciones tanto nos han acompañado durante el confinamiento, los que deben liderar este proceso de cambio.
Concierto para el bioceno es un concierto pensado para plantas, para las 2.292 plantas que ocupan todas las butacas del Liceo, platea y palcos, en el que un cuarteto de cuerda tocará «I Chrisantemi» de Puccini, una composición «deliciosa y a la vez melancólica», en palabras de Ampudia, para comunicar a las plantas la situación que hemos vivido. Eugenio Ampudia explicaba así el proyecto en una entrevista con Rosa Badia para el programa Tot és comèdia en la Cadena Ser.
Otro gesto: todas las plantas serán donadas a profesionales sanitarios, cuidadores por excelencia, en señal de gratitud. El concierto, que podrá seguirse en streaming hoy, 22 de junio, a partir de las 17 horas, puede ser compartido por nuestras plantas en casa. Y muy atentos al final del concierto, al momento de los aplausos.
"A desk is a dangerous place from which to watch the world" (John Le Carré)