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Otoño es tiempo de nostalgia, nuevos proyectos, frío matutino y platos de cuchara que buscan entonar los cuerpos después de largas jornadas de trabajo. Una estación que invita a compartir una taza caliente después de ir al cine o que traslada el ocio al interior de los hogares. Estas sensaciones combinan a la perfección con la sexta edición del -Dart Fest, que acercará del 24 de este mes al 11 de diciembre, 23 documentales sobre arte contemporáneo, de los cuales 11 serán un estreno en España . Esta vez se podrá seguir físicamente en Barcelona (Cinemes Girona, Social Hub, Sala Phenomena y MACBA), Chile (En Santiago y Concepción) y en línea a través de Filmin.
-Dart concibe un arte sin fronteras, al combinar proyecciones de propuestas internacionales y locales. Manifestaciones que giran en torno a la visibilización de colectivos discriminados. O que buscan una inclusión de la perspectiva decolonial en las nuevas narrativas de la escena estadounidense. Las temáticas de los documentales van desde el surrealismo autobiográfico de Lucian Freud al costumbrismo de Letizia Battaglia y Steve McCurry. También hay espacio para el activismo en los proyectos de Tomás Saraceno y Trevor Panglen, mezclando el testimonio documental con la protesta.
Por subrayar una diferencia con el curso pasado, las obras se encuentran más referenciadas socialmente. Quizás, ya consciente del impacto que tiene en el panorama documental español y hace gala de ello. En la estructura observamos colaboraciones con galerías de Barcelona en la proyección de Lucian Freud: A Self Portrait, así como con el FIFA de Montreal. Además, la novedad de que existan sesiones dobles agrupadas por afinidades temáticas ayuda a configurar un contexto y las principales vías que se quieren abordar en su sexta edición.
Tras el éxito del año pasado, -dart vuelven a unirse MACBA en un documental que recoge el trabajo de David Hammons desde sus inicios con el Body Print hasta la actualidad. A través de esa concepción que el festival y el artista comparten, la de arrancar el arte de galerías y museos para inundar nuevos espacios. The Melt Goes on Forever: The Art and Times of David Hammons se resuelve como una suerte de cronología para recorrer el papel del artista negro frente a la opresión racial en los Estados Unidos de los 70’.
Habrá nuevas colaboraciones Montreal International Festival of Films on Art (FIFA), estrenando el documental City Dreamers, sobre cuatro arquitectas canadienses que se atrevieron a retar el lenguaje arquitectónico de sus épocas, proponiendo una nueva visión hacia una transformación más humana del medio urbano. Se proyectará juntamente con Women of the Bauhaus, que saca a la luz a las más de quinientas mujeres que trabajaron en la reconocida escuela como argumento de que la historia es solo una narrativa más.
La apertura se hará con el filme sobre la reciente intervención en el Pabellón Español de la Bienal de Venecia de 2022, realizado por Ignasi Aballí y comisariado por Bea Espejo. Corrección posee un enorme valor documental. Una pulcritud en el relato que parte de la idea inicial del artista al analizar los planos del pabellón hasta la conversión en una obra. Aflora un cuestionamiento del inmovilismo en las Bienales, además, explica de una manera muy convincente la relación entre comisaria y artista.
En Aquí no hay nada que comprender, se aborda la figura de Elena Asins en una suerte de búsqueda vital a través de su trabajo. Gobernada por el vanguardismo, fue una de las pioneras del arte cibernético en el tardofranquismo. Una cualidad que se revela en todo el relato, desvelando aspectos ligados a la estética y al sentido de su obra. Un documental sobrio sobre una artista qué eligió el camino ascético en sus últimos años de vida, una curiosa contradicción considerando la contemporaneidad de su producción artística.
-Dart vuelve a ser una prioridad para el arte contemporáneo, un fondo de armario perfecto para la lluvia, una esperanza para el cine documental y un disgusto para los que no vivimos en Barcelona. Aunque siempre nos quedará Filmin.
"A desk is a dangerous place from which to watch the world" (John Le Carré)