Distibución ayer y hoy

-Técnicamente el sistema está preparado para mucho más. Si no hay más estrenos fílmicos on-line no es por falta de tecnología sino por el control que las productoras quieren ejercer. Un control que implica seguir con los mismos ritmos, las mismas zonas geográficas y las mismas condiciones.

 Las pantallas «en casa» son cada vez más grandes y de mayor calidad. En los multicines (una de las respuestas al consumo doméstico fue la multiplicación de salas) las pantallas son más pequeñas. La distancia de calidad entre casa y cine va disminuyendo.

 El 3D se presenta como algo que puede revivir el cine en el cine… pero mi abuelo ya tenía una cámara de fotos 3D y digamos que esa tecnología nunca despegó…

 En la música ya existen plataformas legales para la escucha de contenidos y se difunden sin problema. Con la imagen en movimiento las apuestas legales se esconden e intentan, como máximo, ser un complemento del videoclub.

 ¿Y los museos? ¿Siguen siendo lo mismo? ¿Existen otros sistemas de presentación? ¿Cómo se acerca la crítica a estos otros posibles lugares? En la sección de críticas de cine en un periódico difícilmente se habla de una película que no esté ahora en una sala de cine. ¿Pasa lo mismo con el arte?