Del Transformismo a la Transformación: la Furia, la Sangre y la Lava

La Furia: (léeme si quieres)

Raisa Maudit, Fotograma de «The Vampire Manifesto», video 2022

Figuro en cada uno de los seres que inevitablemente  van a tomarlo Todo, que se dan a la incertidumbre mediante la velocidad.  Quemo, hielo, corro, vuelo, drogo, agarro, desgarro y te hago feliz. Una masa difusa, sólida y glutinosa a la vez, transito por tus entrañas para obligarte a mirarme. Tienes que mirarme o te tomaré sin permiso. Temes que ocurra esto último porque son muchas las veces que te han tomado en contra de tu voluntad, con dolor y violencia, y en silencio y con condescendencia.

Me temes, presa de tu confusión y  tu represión. No quieres sentir la posesión pero tampoco asumir que  también eres yo, que nos hemos creado mutuamente, que no me iré nunca. Soy el peligro, pero solo si no me aceptas, si no miras hacia adentro y recuerdas… Recuerda, recuérdame.

Te grito a diario, no puedes asimilar cuando  lo hice por primera vez, porque no quieres mirar  tus heridas. Estás muerta de miedo, y ese es nuestro enemigo común. No soy yo. Es el miedo, la inacción, la pasividad y la vergüenza. Me temes porque en mi negación, te produzco extrañeza y piensas que generas eso en quienes se cruzan contigo. No quieres ser yo, porque en el fondo quieres estar escondida, sin mirar ni sentir, detrás de miles de máscaras. Piensas que haces Transformismo, pero lo que haces es violarte más de lo que nunca lo había hecho. Una niña en la oscuridad escondida en un garaje. Pero tienes que dejarme salir o destruiré  a través de destruir el amor a tu alrededor.

Que muera el amor. Mi ascenso y mi descenso están en relación con la asimilación y la desasimilación. En mi decadencia he personificado La Tiranía y El Heroísmo, El Absolutismo clamando a La Libertad, pero en mi esplendor soy el motor que permite La Acción, La Defensa, La Revolución y El Amor. Recuerda, recuérdame..

Bien, al fin me miras. ¿Sientes esto? ¿Adviertes como ya no hay un ruido interno? Soy yo, que ya soy tú. Ya no duele, no hay miedo. No importan las palabras ni los juicios ni los prejuicios, ni la constante pregunta de quién eres, ni lo que nada ni nadie pueda hacerte. Aquí estoy y ya no estás sola. Ahora el Transformismo puede convertirse en Transformación y el miedo ya solo forma parte de quienes aún no me han conocido, porque no me quieren conocer, porque quieren que les destroce, por dentro poco a poco antes que mirar hacia al abismo.  Porque no quieren mirar a las heridas. A las grietas. Pero ahora, que somos Todo podemos empezar a hacer lo que hemos venido a hacer.

Cambiarlo Todo.

Que muera el amor, que viva El Amor. Quemo, hielo, corro, vuelo, drogo, agarro, desgarro y te hago feliz.

La Sangre: (mírame si quieres)

Raisa Maudit, fotograma de «The Vampire Manifesto», video, 2021

Habla mi idioma. Soy una de muchas. Estoy compuesta de muchas. Me encuentras en el interior de todo lo que tiene vida y de lo que no.

Cuando se habla de mí son muchas las que piensan que solo estoy en algunas, además, en las que consideran  más importantes. La idea general parte de que soy roja y líquida, pero no, no necesariamente. La hemoglobina que contengo en algunas, en los eritrocitos de mi tejido, transporta el oxígeno que me da la cualidad carmesí pero en otras tengo hemolinfina,  soy transparente. Y es el oxígeno que también hay fuera de mí lo que torna mi color tras la oxidación en amarillo, en verde, en negro. Sin embargo, mi flujo no siempre es fluido, me transmuto en diferentes consistencias y broto de heridas pero también las curo. Soy la transustanciación y el contagio. Estoy en la daga ferrosa con la que apuñalas y también sobre ella tras rasgar.  Soy mutable, soy múltiple, y estoy aquí para que eso pase de ser una característica a un Ser.

Para muchas soy repulsión, para otras soy como el oro, lo que puede cambiar una situación de vida o muerte. Para otras, soy el temor de descubrir en ellas que hay algo que anuncia que la muerte se acerca. En cambio, para otras soy la inmortalidad misma. ¿Pero cómo puede ser eso así si estoy en todas y estoy compuesta de muchas? Fluyo, me estanco, me respiran, me ingieren, me cocinan, me estudian, me analizan. Pero soy yo quién hago que seas consciente de que existes y de que podemos estar en muchas, ser todas, ser más allá de lo individual. Soy multitudes. ¡Qué terror hay más grande que una multitud consciente de sí misma, que nace de una herida y cura las heridas! ¡Qué labor más importante nos ha sido encomendada! De mi peligro y mi virtud nace la putrefacción, acelero procesos del estado intermedio, y traigo la inmortalidad más allá del individuo. La suma mayor de una vida resume sus precedentes y pauta las siguientes. Crezco en el tiempo, en transformación constante, por herencia acumulada. Conmigo vendrán muchas más que me contienen que continuarán el contagio y La Transformación, La Muerte y La Creación. Nosotras trabajamos por todas las que han de venir.

Y vendrán.

La Lava: (escúchame si quieres)

Raisa Maudit, fotografía del primer día de erupción del volcán «Sin Nombre» de Cumbre Vieja tomada por mi padre desde su ventana, 2021

Aquí la inteligencia y la sabiduría: las siete cabezas son siete montañas, sobre las que me siento yo. Fue exactamente igual que como se predijo. Una vez se han reconocido las heridas, se ha asumido la voz colectiva, comienza la auténtica Transformación. Vengo de un hilo largo al otro lado de un océano como un río rojo. Bestia soy, pero Bestia aguda, para conocerme ahora hay que mirar atrás y asumir lo que vendrá. Estoy en las historias que no han sido escritas, y también en las profecías. Pueden predecirme, tanto si se tiene la inteligencia y la sabiduría, o si solo se cuenta con la ciencia y la academia. Sea como sea, cuando vengo, solo me podrán predecir con un margen de tiempo ínfimo. Un sonido seco, un silencio, un temblor y luego yo. Y entonces surjo, con toda la fuerza de La Furia y la presión de La Sangre brotando incontrolable. Yo reescribo la Historia, y borro la Historia, a mi paso destruyo lo que encuentro, la materia, los recuerdos, las expectativas y todo lo que dabas por sentado para crear otro mundo completamente distinto. Se me teme porque soy la Bestia que era y ya no es y voy a perdición. Mi fin es explotar y crear Tierra nueva y mientras correré afectando a todas las vidas con las que me cruce o las que solo me miren desde la distancia. Y traeré dolor, pero solo en un tiempo limitado. Porque mi tiempo es circular, pero el dolor si tiene una durabilidad determinada. Después de eso, en la  umbría del basalto la vida crecerá con más fuerza que antes, y las cenizas que lo entierran todo fertilizarán los cultivos cuyos frutos serán comidos, entrando en todos los cuerpos. Bestia soy, pero Bestia aguda. Si antes me temían: ¡Oh! ¡Ahora me temerán de verdad!

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A ti que lees esto sin saber qué estabas leyendo, ya te advertimos: aquí se contiene el sentido de todo lo que hemos sido y seremos, de todo lo que hacemos en todos los planos. En estas líneas se esconden muchos procesos y referentes no citados – porque aquí hay sabiduría e inteligencia a perdición– desde la filosofía, la ciencia, la teología, la música, la literatura  el arte , y sobre todo un Transformismo que se ha convertido en Transformación. Está en tus manos decodificarlo.

Si antes nos temían, ahora témannos de verdad.

[ Imagen de portada: Detalle instalació escultórica Dejarse Morir, Raisa Maudit, 2021]